Semana 36 “No Alcanza”

La semana pasada aprendimos cómo deshacerse del miedo para evitar agregar miedo a la mezcla. Esta semana, como prometí, me gustaría explorar la prueba que Abraham enfrentó con respecto a su único hijo Isaac. ¿Recuerdas en la lección sobre el diezmo, Abriendo las ventanas del cielo, Principio # 5?

Cuando Dios le preguntó a Abraham por su hijo, no lo retuvo; Como resultado, Dios le dice: “porque ahora sé que temes a Dios, ya que no me has rehusado tu hijo, tu único hijo. . . que por cuanto has hecho esto y no me has retenido a tu hijo, tu único, de cierto, te bendeciré enormemente. . . ”(Génesis 22:12, 17).

Muy a menudo, cuando Dios revela algo que tiene para nuestro futuro, entramos en modo de pánico, nuevamente debido a la "inclinación" cuando consideramos los detalles o ramificaciones de lo que nos ha pedido que hagamos. O podría ser porque tenemos nuestros propios planes y Su plan simplemente no se alinea con él.

Comencemos con lo último, cuando lo que Él nos reveló o nos llamó o las circunstancias en las que nos puso simplemente no se alinea con lo que planeamos, lo que estamos firmes que queremos.

Recientemente dentro de nuestro equipo ministerial, he sido testigo de esto mismo. A menudo, las novias que adoran a su EC luchan por tener su futuro "abierto", permitiéndole planearlo. En una de esas situaciones, me hizo observar (pero no decir nada) cuando me mostró su plan mucho antes de revelarlo a su novia. ¡Y podía ver que su plan conduciría a bendiciones que nunca podría haber imaginado! Efesios 3:20 NTV “Y ahora, que toda la gloria sea para Dios, quien puede lograr mucho más de lo que pudiéramos pedir o incluso imaginar mediante su gran poder, que actúa en nosotros.” Me hizo redactar el correo electrónico compartiendo los detalles con ella, su plan, sus escandalosas bendiciones, pero me pidió que esperara para enviarlo.

Lamentablemente, nunca tuve que enviárselo. En cambio, solo una pequeña porción de lo que me mostró realmente sucedió. Se quedó corto lo que Él gloriosamente quería hacer por ella. No sucedió porque se produjo el pánico. Entendemos cómo puede suceder esto, ¿cierto? ¿Quién de nosotros no ha lidiado con nuestro sentido de urgencia por ganar al final? Entonces, para ella, al final, Él le dio el deseo de su corazón, su plan, pero fue terriblemente corto y mucho menos de lo que vi que había planeado para ella.

Curiosamente, mientras sigo viendo y escuchando diferentes conversaciones, he sido testigo de que su plan no era tan "perfecto" como esperaba que fuera. Eso es solo porque Su plan es perfecto, el nuestro nunca puede serlo.

Vemos esto cada vez que una mujer rechazada que está sufriendo encuentra RMI. Su plan siempre es querer que Dios restaure su matrimonio, pero solo aquellas que son lo suficientemente valientes, debido al haber experimentado Su amor, son capaces de soltar y desear Su plan perfecto. 1 Juan 4:18 “sino que el amor perfecto echa fuera el temor. El que teme espera el castigo, así que no ha sido perfeccionado en el amor."

Cuando realmente creemos que nuestro EC nos ama y quiere lo mejor para nosotros, es solo entonces que podemos abandonar nuestro plan y aceptar Su plan para nuestras vidas. "Porque Mis pensamientos no son los pensamientos de ustedes, Ni sus caminos son Mis caminos", declara el Señor. Porque como los cielos son más altos que la tierra, Así Mis caminos son más altos que sus caminos, Y Mis pensamientos más que sus pensamientos.” Isaías 55: 8-9 

¿Por qué no me hizo compartir Su plan con esta novia? Seguramente si ella hubiera visto el plan, ella voluntariamente hubiera soltado su voluntad y hubiera abrazado la suya, que es lo que reflexionaremos la próxima semana.