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La semana pasada te animé a que te metieras con tu HH, hablándole de tus planes, pero luego escuchando con un corazón abierto Sus planes. Aún más importante, te animé a preguntarle sobre las cosas que ha hecho en el pasado, para fortalecer tu fe en Su futuro para ti. Esta semana me gustaría compartir un principio que hago todas las noches sin falta. Cada noche, cuando cierro los ojos para quedarme dormida, le pregunto a mi EC a dónde vamos, qué cima de montaña o mar expansivo imaginaré desde los días en que viajaba con Él, con lo que soñaré mientras duermo.

A veces sueño con las cimas de las montañas, como hace una noche cuando fui transportada de regreso a los Alpes, donde miraba directamente al Matterhorn. (Aquí hay una foto de lo que veo cuando cierro los ojos). No fue solo estar allí, tan sobresaliente e irreal como puedes ver, sino todo lo que ocurrió que me llevó a estar allí. La prueba de mi corazón que pasé felizmente me llevó a taaaaantas cosas increible que sucedieron, antes y después de estar cara a cara con una de las vistas más impresionantes que he vivido miles de veces!

Este ritual nocturno no solo me hace caer en un sueño profundo (junto con una sonrisa tonta, estoy segura de que se extiende en mi cara). Pero también aumenta mi fe y me mantiene inmune a los peligros de la resbaladiza pendiente del miedo, que todos conocemos rápidamente si no se detiene.

Actualmente estoy en un patrón de espera y tal vez tú también.

Entonces, ¿qué sucede cuando tu deseo no se cumple, una y otra y otra vez? Incluso Proverbios 13:12 dice: "La esperanza que se demora enferma el corazón, pero el deseo cumplido es árbol de la vida."

Primero, aplicamos el principio de Romanos 4:18, "Creyó en esperanza contra toda esperanza, a fin de llegar a ser padre de muchas naciones, conforme a lo que se le había dicho: 'Así será tu descendencia.'" Recuerda lo imposible que fue para Abraham engendrar un hijo, y también para Sara concebir un hijo, especialmente porque parecía que había perdido la edad para concebir, junto con la "promesa" que aparentemente se había cumplido con el nacimiento de Ismael?

Permíteme animarte a que simplemente le pidas a tu EC que te lleve a tus propios lugares felices que Él te ha llevado. Tus propias experiencias en la cima de la montaña y el vasto mar que puedes haber olvidado, pero Él no lo ha hecho.

Querida novia, cada vez que te encuentres en un patrón de espera, ¡asegúrate de disfrutar este momento, ahora mismo! Sal con tu Amado EC y ten recuerdos con Él como lo harían los dos amantes

Disfruta al recordar el pasado con Él. La primera vez que se conocieron, cómo te enamoraste, cuando descubriste tu canción de amor favorita y le hablaste sobre los regalos, lugares y experiencias que disfrutaron como pareja. Si lo haces, entonces la espera, quedarte quieta, no será incómodo, tentándote a adelantarse a Él. No, se convertirá en tu lugar feliz. "Sonreirás al futuro" como la mujer de Proverbios 31. Estarás tan contenta hasta el punto que ya no te importará cuánto esperas.

1 thought on “Semana 38 “Patrón de Espera””

  1. “La esperanza que se demora enferma el corazón, pero el deseo cumplido es árbol de la vida.” Proverbios 13:12

    Mientras medito en esta lección y especialmente este verso me doy cuenta de que tal y como dice Erin es mejor pensar en los deseos cumplidos (en pasado) por mi Amado que en la esperanza que siento que “se tarda” (“…con toda seguridad ocurrirán. Aunque pienses que se demoran en cumplirse, no te desesperes. ¡Todo acontecerá en el día que he señalado!” Habacuc 2:3 sinceramente creo que es así, solo espero que llegue el dia que mi Amado marcó en Su calendario para recibir mi promesa).

    En este momento de mi vida mi fe esta muy fortalecida, puede ser porque He visto Su mano poderosa actuando y moverse a mi favor con relación a la promesa que espero, mi fe se ha fortalecido, aun cuando también he visto oposición sigo confiando, sigo positiva y con esperanza contra esperanza, ciertamente mi fe es mas fuerte ahora porque he conocido de primera mano Su fidelidad. Cuando El cumplió Sus promesas a lo largo de mi viaje de restauración personal y de matrimonio, luego con respecto a mi salud de lo cual doy testimonio ahora —porque es reciente— de que El me ha sanado, me siento muy animada y confiada.

    “Deléitate en el Señor y él te concederá los deseos de tu corazón” Salmos 37:4. Al imaginar si El me preguntara que es lo que quiero ahora, como cuando me preguntaban de niña “¿si te encontraras la lampara de Aladino y pudieras pedir 3 deseos que pedirías?” solia pensar y responder que queria: una carrera profesional exitosa, una familia y comodiades de vivienda y movilidad (todo lo que me fue quitado en mi desierto!!) Medité en los deseos de mi corazón actualmente y me di cuenta de que nada de lo que antes pedía es algo que concientemente ahora crea que podria hacerme feliz, simplemente porque ya soy feliz con El, ya tengo todo lo que necesio y quiero, no tengo nada más que pedirle. Creo que en parte por eso me quede estancada un buen tiempo sin orar por nada en especifico y ahora retomé la oración por Su llamado a ponerme de acuerdo con El en Sus planes para mi, pensando en Su deseo y proposito conmigo. El no quiere que me enferme, entonces no quiere que me aferre a la esperanza haciendola un idolo, lo cual yo solia hacer manteniendome pensando y orando por ello de forma casi obsesiva, sino que me aferre a El y me mantenga deleitandome en EL, es ahí en donde podré gozar de los frutos del árbol de vida que me mantendran lejos de la muerte (en todo sentido).

    En conclusión, creo que la espera termina cuando me doy cuenta de que ya tengo lo que deseo, porque lo tengo a EL.

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