Lea el Testimonio de matrimonio RESTAURADO,
“El quiere que lo tengamos todo”
Este testimonio fue tomado de uno de nuestros muchos
libros por palabra de sus Testimonios
para ayudarle a
superar cualquier duda o el miedo en
la capacidad de Dios y el deseo de
restaurar su matrimonio!
Capítulo 10 "Él Vuelve El Corazón"
Como canales de agua es el corazón del rey
en la mano del Señor;
Él lo dirige donde le place
—Proverbios 21:1
¿Todos le han dicho que su esposo tiene su propia voluntad; por lo tanto él puede “escoger” no regresar a usted?
Mientras intenta restaurar su matrimonio será bombardeada, como otras mujeres lo han sido, por el ataque violento de aquellos que le dirán que es la elección de su esposo y que él tiene voluntad propia para escoger dejarle a usted o estar con otra mujer. Yo me enfrenté a la misma respuesta, especialmente por parte de pastores. Pero, ¡¡gloria a Dios, Él me enseñó la verdad!!
Cuando busqué las respuestas a este dilema de la voluntad del hombre frente a la voluntad de Dios, descubrí que la Biblia continuamente se refería a la “voluntad de Dios” sin mencionar la voluntad del hombre.
Déjeme mostrarle lo que Él me mostró a mí:
¡¡No es la voluntad del hombre sino la de Dios!!
“...Él actúa conforme a Su voluntad…” (Daniel 4:35).
“…el Altísimo domina sobre el reino de los hombres y que lo da a quien le place” (Daniel 4:25).
“… Dios… puede librarnos…” (Daniel 3:17).
Considere a Nabucodonosor. Después de que su orgullo le causara el arrastrarse como un animal, él dijo de Dios “Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada, más Él actúa conforme a Su voluntad en el ejército del cielo y entre los habitantes de la tierra. Nadie puede detener Su mano, ni decirle: ‘¿Qué has hecho?’” (Daniel 4:35). ¿No es éste el mismo Dios que aún hace las cosas de acuerdo con Su voluntad? ¿Es su esposo mayor que el Rey Nabucodonosor?
Considere a Jonás también. Jonás no estaba dispuesto a hacer lo que Dios quería que él hiciera, pero Dios lo hizo estar dispuesto. “Y el Señor dispuso un gran pez que se tragara a Jonás; y Jonás estuvo en el vientre del pez tres días y tres noches” (Jonás 1:17). ¡¡Dios es infinitamente capaz de hacer que su esposo esté dispuesto!!
Finalmente, considere a Pablo. “Saulo, respirando todavía amenazas y muerte contra los discípulos del Señor... de repente resplandeció a su alrededor una luz del cielo... Saulo se levantó del suelo, y aunque sus ojos estaban abiertos, no veía nada... Señor Jesús... me ha enviado para que recobres la vista y seas lleno del Espíritu Santo». Al instante cayeron de sus ojos como unas escamas, y recobró la vista; y se levantó y fue bautizado” (Hechos 9:1–18).
¡¡Dios es infinitamente capaz de cambiar a su esposo en un instante!! ¡Lo he visto infinitas veces, con mi propio esposo y con muchos otros esposos! Si usted dice “Pero usted no conoce a mi esposo”, yo le diría— ¡¡usted no conoce a Dios!! Él la cambió, ¿no?
Volviendo el corazón
Oirá a pastores y a otros cristianos que dicen que es la voluntad de su esposo el abandonarle, divorciarse de usted, o estar con otra mujer. Pero nosotras acabamos de aprender en la Escritura que no es la voluntad del hombre sino la de Dios.
Puede ser la voluntad de su esposo el abandonarla, divorciarse, o estar con alguien más. Sin embargo, ¡Dios puede cambiar su corazón!
No necesitamos preocuparnos por su voluntad. En lugar de eso necesitamos orar por el corazón de nuestros esposos para que sean cambiados. “Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del Señor; Él lo dirige donde le place” (Proverbios 21:1).
¡Ore que Dios le dé a su esposo un nuevo corazón y reemplace su corazón de piedra por uno de carne! “Además, les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes; quitaré de su carne el corazón de piedra y les daré un corazón de carne” (Ezequiel 36:26).
El primer paso para cambiar el corazón de su esposo es encontrar las promesas de Dios, Sus verdades, y luego cumplir con las condiciones para esas promesas. Estos son los versículos que yo memoricé y usé para volver el corazón de Dan hacia mí de nuevo.
“Cuando los caminos del hombre son agradables al Señor, aun a sus enemigos hace que estén en paz con él” (Proverbios 16:7).
“Pon tu delicia en el Señor, y Él te dará las peticiones de tu corazón” (Salmo 37:4).
“Encomienda al Señor tu camino, confía en Él, que Él actuará” (Salmo 37:5).
“Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas” (Mateo 6:33).
Recuerde, usted necesita poner a Dios primero en su vida; Él nunca quiere ser el segundo lugar para nada ni para nadie. Una vez que Él es el primero, comenzará a transformarla a Su imagen. Es entonces cuando comenzará a ver que el corazón de su esposo se vuelve hacia usted.
Si lucha con este principio de la voluntad del hombre contra la voluntad de Dios, necesitará renovar su mente con los versículos de este capítulo para superar las dudas de la “teología de la voluntad del hombre” y reemplazarlo con el enfoque de Dios, ¡que es el corazón!
Veamos las Escrituras que nos dicen cómo Dios cambió los corazones de hombres e incluso de reyes:
“Dios... que ha puesto esto en el corazón del rey...” (Esdras 7:27).
“Yo endureceré el corazón de los egipcios… ” (Éxodo 14:17).
“El Señor endureció el corazón de faraón… ” (Éxodo 10:27).
“Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del Señor; Él lo dirige donde le place” (Proverbios 21:1)
En el libro de Proverbios aprendemos sabiduría. Proverbios 1:2-7 listan los beneficios del conocimiento:
Para adquirir sabiduría.
Para recibir instrucción.
Para recibir instrucción sobre comportamiento sabio.
Para recibir instrucción en rectitud, justicia y equidad.
Para infundir sagacidad en los inexpertos.
Para infundir conocimiento y discreción en los jóvenes.
¡Lea Proverbios todos los días para obtener sabiduría! (Vaya a la sección “Salmos y Proverbios” de nuestro sitio web “El Animador.com” para ver los versículos para leer todos los días; solo otro de nuestros beneficios para miembros que la ayudará a restaurar su matrimonio).
Esposos que no están dispuestos
No todos los esposos regresan a casa incluso después de que Dios le da vuelta a sus corazones. Desafortunadamente, muchos esposos van en contra de sus corazones porque sus esposas son las mismas mujeres que eligieron dejar. Una vez más, Dios es más que capaz de volver el corazón de su esposo hacia usted. Si todavía es contenciosa, la bondad no está en su lengua, no exhibe un espíritu suave y apacible, entonces, una vez que su corazón se vuelva hacia usted, ¡la vieja usted hará que endurezca su corazón y tome una decisión mental en lugar de una decisión del corazón!
¡Asegúrese de leer y releer este libro una y otra vez! Asegúrese de vivir en la Palabra. Asegúrese de pasar horas diarias con la cara al suelo, buscando Su rostro. ¡Debe ser una mujer nueva para que su esposo quiera seguir su corazón y volver a casa! Recuerde, la razón por la que su esposo se fue o fue atrapado por una adúltera es que su casa no fue construida sobre la roca. Estaba dividido; fue derribado por sus palabras y su actitud, en otras palabras, su contienda o arrogancia.
Veamos en Proverbios y en algunas otras Escrituras del Nuevo Testamento:
Sus propias manos. “La mujer sabia edifica su casa, pero la necia la derriba con sus manos” (Proverbios 14:1).
Casa del malvado. “La casa de los impíos será destruida” (Proverbios 14:11).
Casa dividida contra sí misma. “Todo reino dividido contra sí mismo es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma no se mantendrá en pie” (Mateo 12:25).
Pero no se derrumbó. “Por tanto, cualquiera que oye estas palabras Mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca; y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; pero no se cayó, porque había sido fundada sobre la roca” (Mateo 7:24–25).
Edificados juntamente. “...siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular, en quien todo el edificio, bien ajustado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor. En Cristo también ustedes son juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu” (Efesios 2:20–22).
Ningún hombre lo separe. “Jesús les respondió: ¿No han leído que Aquel que los creó, desde el principio los hizo varón y hembra, y dijo: “Por esta razón el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne”? Así que ya no son dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que Dios ha unido, ningún hombre lo separe” (Mateo 19:4–6).
¡Dios ha prometido sanar, restaurar y crear alabanza en sus labios! “A causa de la iniquidad de su codicia, me enojé y lo herí. Escondí Mi rostro y me indigné, y él siguió desviándose por el camino de su corazón. He visto sus caminos, pero lo sanaré. Lo guiaré y le daré consuelo a él y a los que con él lloran, poniendo alabanza en los labios. Paz, paz al que está lejos y al que está cerca, dice el Señor, ‘y Yo lo sanaré’”. Isaías 57:17–19.
“Porque quizá por esto se apartó de ti por algún tiempo, para que lo volvieras a recibir para siempre, ya no como esclavo, sino como más que un esclavo, como un hermano amado, especialmente para mí, pero cuánto más para ti, tanto en la carne como en el Señor” (Filemón 1:15–16).
Busque al Señor para quebrantarla y permita que el Señor la cambie y la transforme para que cuando (no si) Dios vuelva el corazón de su esposo, ¡vea una nueva usted! (Consulte “Una Mujer Sabia” para más ayuda).
¡Nada es imposible para Dios!
¡El Señor vuelve el corazón hacia donde Él desea!
Compromiso personal: pedir a Dios que vuelva el corazón de mi esposo y no temer la voluntad del hombre.“Basada en lo que he aprendido en la Escritura, me comprometo a confiar en el Señor para que vuelva el corazón de mi esposo. Yo disipo las mentiras de que mi esposo tiene una voluntad propia y por lo tanto, Dios no intervendrá a mi favor ni responderá mis oraciones. Por el contrario, creo que la ‘voluntad de mi esposo’ seguirá hacia donde Dios vuelva su corazón de regreso al hogar”.
Si está lista para comprometerse con DIOS a terminar el curso, AL HACER CLIC AQUÍ ha aceptado, y está lista para documentar este primer paso de su Viaje de Restauración en su formulario "Notas de mi viaje de restauración". Tómese su tiempo, siéntese, tome su café o té y vierta su corazón en su Diario.
Gracias esta lección ayudó mucho a dar respuesta a pensamientos que me abordaron hoy y darme Su Fe.