Podcast

Esta semana me gustaría no sólo actualizarla sobre mi viaje de tres meses lejos de vivir en el "paraíso", pero también espero levantar más la carga que puede estar tratando de llevar. La carga de esa esposa perfecta de Proverbios 31 (es posible que desee leer o volver a leer la introducción 1 de Trabajadoras en casa. Esa demasiado perfecta mujer de Proverbios 31).

Lo primero es lo primero. Todas somos conocidas y nos referimos a nosotras mismas como la novia de nuestro Esposo Celestial. No somos Su esposa porque una esposa está diseñada para completar al esposo. Nuestro EC está más que completo: ¡Él es infinita y expansivamente todo! Como Su novia, no Su esposa, nuestro Novio está listo y esperando para envolvernos, a Su novia, con sus brazos amorosos, siempre nos presta un oído atento y compasivo, respondiéndonos con actitud de comprensión cada vez que necesitamos algún apoyo emocional de Él. Ahora que he establecido esta base poderosa, permítame explicarle cuán imperfecta soy —excesivamente agradecida de lo perfecto que es Él— ¡El Hombre Perfecto que me llena!

Cuando me dirigí al norte durante mis tres meses de viaje, no tenía idea de cómo sería. Aparte de las fotos, no tenía idea de dónde me hospedaría. Nunca lo vi (excepto en internet) y cuando comencé a buscar más detalles, Él me detuvo diciendo: "Solo confía en mí". Entonces, por supuesto, lo hice. No obstante, todas sabemos que no todo lo que Él nos llama a atravesar es encantador, y permítanme decir que este cambio estuvo lejos de ser perfecto. Lo que hace a Su novia diferente, de todos modos, es cómo Él nos lleva a navegar a través de todas las "diversas pruebas" de una manera acorde a Su novia.

Me desperté riendo al tercer día y mientras tomábamos juntos nuestro café de la mañana, comencé a decirle mis verdaderos sentimientos. Le dije que donde vivíamos (Él y yo) no me hacía feliz. Nuestra conversación fue algo como esto:

"Odio todo."

"¿Todo?"

"Bueno, tal vez no todo ..."

Entonces, inmediatamente comencé a enumerar cada cosa que realmente me gustaba de dónde vivíamos, descubriendo la semana próxima cómo el compartir abierta y honestamente con mi Precioso Esposo resultó en que Él me ayudara a cambiar mi enfoque y a disfrutar mi Vida Abundante de la forma en que Él anhela que vivamos!

Isaías 30:18—
"Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad; por eso se levanta para mostrarles compasión. Porque el Señor es un Dios de justicia. ¡Dichosos todos los que en él esperan!"

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *